sábado, 5 de septiembre de 2009

Historia de Moscú.



La primera referencia rusa de Moscú data de 1147 con Yuri Dolgoruki, nueve años más tarde, en 1156, el príncipe Yuri Dolgoruki de Rostov ordenó la construcción de un muro de madera que rodeara la ciudad que tuvo que ser reconstruido varias veces. Tras el saqueo de 1237-1238, en el que los mongoles quemaron la ciudad y mataron a sus habitantes, Moscú se recuperó y se convirtió en 1327 en la capital de un principado independiente.

En 1300 Moscú fue gobernado por Daniil Aleksandrovich, el hijo de Alexander Nevski, un miembro de la dinastía Rurik. Su posición favorable en la cabecera del río Volga contribuyó a su expansión constante. Moscú se convirtió en un estable y próspero principado y atrajo a un gran número de refugiados procedentes de toda Rusia. En 1304, Yury de Moscú impugnó a Mijaíl de Tver para el trono del principado de Vladimir. Ivan I sustituyó la ciudad de Tver como centro político del Principado de Vladímir-Súzdal y se convirtió en el único recolector de los impuestos para los gobernantes tártaro-mongoles, tras la invasión mongola de Rusia. Iván ganó una importante concesión del Khan mediante el pago de importantes tributos. A diferencia de otros principados, Moscú no fue dividido entre sus hijos, lo que lo mantuvo intacto.

Mientras el Khan de la Horda Dorada inicialmente trató de limitar la influencia de Moscú, cuando el crecimiento del Gran Ducado de Lituania comenzó a amenazar toda Rusia, el Khan fortaleció Moscú para contrarrestar a Lituania, lo que le permitió convertirse en una de las más poderosas ciudades de Rusia. En 1380, el príncipe Dmitri Donskói de Moscú dirigió al ejército ruso en una importante victoria sobre los tártaros en la batalla de Kulikovo que no obstante, no fue decisiva. Sólo dos años más tarde Moscú fue saqueada por el Khan Toqtamish. En 1480, Iván III rompió finalmente el dominio tártaro, lo que permitió a Moscú convertirse en el centro del poder en Rusia. Bajo reinado de Iván III, la ciudad se convirtió en la capital de un imperio que finalmente abarcaría toda la actual Rusia y otras tierras.

En 1571, los tártaros de Crimea atacaron y saquearon Moscú, quemando todo, excepto el Kremlin. En 1609, el ejército sueco dirigido por Jacob Conde de la Gardie y Evert Horn comenzó su marcha de Velikiy Novgorod hacia Moscú para ayudar al Zar Vasili Shuiski, entraron en Moscú en 1610 y reprimieron la rebelión contra el Zar, pero dejaron la ciudad a principios del año 1611, tras lo cual la ciudad fue invadida por el ejército de la Mancomunidad Polaco-Lituana, y Segismundo III trató de ocupar el trono ruso. En 1611 Moscú sufrió un gran incendio. En 1612, el pueblo de Nizhny Novgorod y otras ciudades rusas conducidos por los príncipes Dmitry Pozharsky y Kuzma Minin se levantaron contra los ocupantes polacos, sitiaron el Kremlin y los expulsaron. En 1613, el Zemsky Sobor eligió a Miguel I de Rusia Romanov zar, estableciendo la dinastía Romanov.

No hay comentarios: